Tienen razones para sentirse perjudicados, esto le exigen a U de Chile

Universidad de Chile, aún resintiendo la suspensión de último minuto de su partido contra Cobresal, enfrenta nuevos desafíos administrativos que han exacerbado la sensación de perjuicio dentro del club. Esta percepción se ve reforzada tras las recientes interacciones con las autoridades, en el marco de la organización de su próximo encuentro frente a Audax Italiano.

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En una reunión con la Delegación Presidencial y Estadio Seguro, los directivos de Azul Azul se encontraron con solicitudes inesperadas que podrían impactar significativamente en la logística y la atmósfera del próximo partido.

Entre las peticiones destacan un cambio de horario, moviendo el encuentro de las 20.30 a las 18.00 horas, una modificación que no solo afecta a la U, sino que también plantea un dilema para la ANFP debido a la programación previa de otros partidos.

Además, se ha planteado una reducción en el aforo permitido para el Estadio Nacional. A pesar de la intención de Azul Azul de llenar el recinto con 43 mil aficionados, las autoridades han sugerido limitar la asistencia a 30 mil personas, incluso menos de lo permitido en el duelo anteriormente suspendido contra Cobresal.

Universidad de Chile espera la solución definitiva

La insistencia de Estadio Seguro y la Delegación Presidencial en estos cambios refleja una precaución que, si bien busca garantizar la seguridad y el orden, también plantea interrogantes sobre la equidad y la consistencia de las medidas aplicadas a los distintos clubes y partidos.

La confirmación del cambio de horario para el partido contra Audax Italiano, ahora programado para las 18.00 horas, según la página oficial del Campeonato Nacional, marca un avance en la organización del evento. Sin embargo, la definición del aforo total permanece en el aire, con una decisión pendiente que podría afectar la planificación y las expectativas del club y sus seguidores.