Confían en Gustavo Álvarez, pero un histórico mete presión y exige una victoria

La semana previa al Superclásico ha desatado una ola de expectativas en el entorno de Universidad de Chile, especialmente tras el buen inicio de temporada bajo la batuta de Gustavo Álvarez.

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A pesar de la confianza depositada en el técnico argentino, las voces históricas del club comienzan a elevar la presión, y uno de ellos, Gerardo Pelusso, ha sido enfático en su demanda: es imperativo cortar la racha de 23 años sin victorias en el Estadio Monumental ante Colo Colo.

Gerardo Pelusso, recordado técnico azul, compartió en Radio ADN su incredulidad frente a la prolongada sequía azul en territorio albo. "Parece mentira que han pasado más de 20 años que no se le ha podido ganar a Colo Colo en el Monumental. A nosotros nos tocó ir al Monumental en un momento en que el equipo no estaba en su mejor momento”, rememoró el exentrenador.

Esta exigencia de Pelusso encuentra eco en las aspiraciones de Gustavo Álvarez, quien tras el reciente triunfo frente a Deportes Copiapó, reconoció que superar la barrera psicológica y física en el Monumental representa el desafío más significativo para su equipo. "Las rachas son para romperse y cuando no se consigue algo hace un tiempo, hay que hacerlo. De eso se trata", declaró Álvarez tras la victoria en el norte.

Ni en Colo Colo ni en U de Chile están conformes

El Superclásico del fútbol chileno se verá limitado a un aforo de 32 mil personas, cifra inferior a la capacidad total que el club local había solicitado. Además, solo podrían ingresar hinchas locales.

Esta decisión, informada por El Mercurio, se tomó considerando diversos antecedentes, marcando así una restricción significativa para uno de los encuentros más emblemáticos del país, programado para este domingo a las 18:00 horas.

La concesionaria Blanco y Negro expresó su descontento ante esta medida, ya que tenían la intención de aprovechar el total de la capacidad del estadio. La reducción del aforo no solo afecta la experiencia del evento, sino que también implica una considerable merma económica para el club, estimada en unos 100 millones de pesos, debido a la disminución de 10 mil espectadores respecto a su capacidad máxima.

Al mismo tiempo, desde la U se quejaron por el castigo a sus hinchas, que no podrán acompañarlos al recinto de Macul.